En la época de Nostradamus ya se representaba al signo Libra con una balanza. Por eso, nuestro profeta nunca dudó de que las personas nacidas bajo este signo representan el equilibrio por encima de cualquier otra cualidad. Se trata de gente cabal, que sopesa los pros y los contras de cualquier acción antes de llevarla a cabo y que, por el mismo motivo, ejercen a la perfección el papel de mediadores en conflictos diversos.
Sin embargo, tanta ecuanimidad sacaba un poco de quicio a Nostradamus, el cual acusaba a los Libra de no mojarse demasiado en algunas cuestiones. Y es que a veces quieren quedar bien con todo el mundo aunque sepan que solo una de las dos partes lleva la razón.
Otra cualidad positiva de los Libra según Nostradamus es su instinto familiar. Aunque a lo largo de su juventud hayan sido un poco descarriados, cuando se casan o se convierten en padres su actitud da un giro de 180 grados. Son cariñosos, sensibles y lo dan todo por sus maridos, esposas e hijos. Se entregan al máximo con tal de que en su hogar siempre reine la felicidad.
Este afán por defender la institución familiar podría ser sinónimo de que a los Libra les gusta la rutina, pero todo lo contrario: las personas de este signo luchan por hacer cosas nuevas diariamente. Les gusta sorprender a los demás y, por supuesto, les gusta dejarse sorprender, cosa realmente fácil, porque siempre están predispuestos a dejarse querer por quienes están a su alrededor.
Sin embargo, tanta ecuanimidad sacaba un poco de quicio a Nostradamus, el cual acusaba a los Libra de no mojarse demasiado en algunas cuestiones. Y es que a veces quieren quedar bien con todo el mundo aunque sepan que solo una de las dos partes lleva la razón.
Otra cualidad positiva de los Libra según Nostradamus es su instinto familiar. Aunque a lo largo de su juventud hayan sido un poco descarriados, cuando se casan o se convierten en padres su actitud da un giro de 180 grados. Son cariñosos, sensibles y lo dan todo por sus maridos, esposas e hijos. Se entregan al máximo con tal de que en su hogar siempre reine la felicidad.
Este afán por defender la institución familiar podría ser sinónimo de que a los Libra les gusta la rutina, pero todo lo contrario: las personas de este signo luchan por hacer cosas nuevas diariamente. Les gusta sorprender a los demás y, por supuesto, les gusta dejarse sorprender, cosa realmente fácil, porque siempre están predispuestos a dejarse querer por quienes están a su alrededor.
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